¿Qué piensa la sociedad?

El tema que estamos tratando en este blog, está creando de alguna manera, un debate social importante, ¿cómo están influyendo las nuevas tecnologías en nuestra lengua? ¿están ´´cargándosela``? ¿afectará esto que está ocurriendo a la literatura dentro de unos años? y una de las más llamativas e impactantes preguntas, ¿qué va a pasar con el castellano?
Como hemos anunciado anteriormente ,este tema está creando un debate social, intentaremos resumir las opiniones de distintas personas que han colaborado en este trabajo.
Hay quién piensa que en nuestras redes sociales, podemos hablar con abreviaturas, como queramos, porque según dicen, la lengua al fin y al cabo tiene que ser un  medio para comunicarnos y entendernos, dicen también, que a lo largo de la historia, la lengua ha ido evolucionando, del latín a las lenguas romances, el castellano...
Defienden que la lengua, tiene que evolucionar con los humanos.


Otro colectivo de la población, aporta que aunque la lengua tenga que evolucionar con los humanos, ahora mismo lo que se está produciendo no es eso, bajo su punto de vista, se está creando otro idioma realmente diferente al actual, que está influyendo negativamente al nivel social de cultura, y lo más importante de todo, está perjudicando a los estudiantes a la hora de adquirir sus competencias lingüísticas básicas


También hay quién opina que la situación que se está dando respecto a la lengua, no es realmente importante, defienden la libertad de expresión y no ven ningún problema en que la gente, se comunique con abreviaciones, o como quiera, dicen que se está creando una alarma absurda acerca de este tema.


Ya para finalizar, no está de más mencionar a aquellos que dicen que esta situación  va a influir muy negativamente a lo largo del tiempo a nuestra lengua que tan rica historia tiene, y a su literatura, afirman que se va a perder una lengua con historia, con orígenes arraigados a una de las culturas más importantes que han existido , la romana, y se lamentan, porque bajo su punto de vista, las nuevas generaciones venideras, no podrán entender la literatura actual y la medieval o la renacentista por ejemplo.